Polaridades Astrológicas
Las polaridades astrológicas consideran la existencia de dos fuerzas primordiales opuestas, pero complementarias, que son esenciales en el universo: lo femenino, que está asociado a lo interior, lo pasivo y a la tierra; y lo masculino, vinculado a lo exterior, lo activo y al cielo. Ambas energías son necesarias para mantener el equilibrio universal.
De hecho, el enunciado de la Ley de Opuestos Complementarios nos recuerda que “todo es dual; todo tiene polos; semejante y desemejante son lo mismo; los opuestos son idénticos en naturaleza, pero diferentes en grado.» Esta Ley también afirma que “para comprender algo, se requiere conocer su opuesto”, porque nada existe en nuestra realidad sin su contra parte. Así, nos es más fácil comprender lo que es “caliente”, cuando comparamos ese estado con su opuesto “frío”, para entender lo que los diferencia, pero ambos estados hablan de temperatura (son idénticos en naturaleza, pero diferentes en grado). Es una regla constante e invariable a la que están sujetas todas las cosas, y eso, por supuesto, también incluye a las energías zodiacales con las que trabaja la Astrología.
Así, los doce signos zodiacales y el tipo de energías que cada uno manifiesta, también nos recuerdan esta Ley de Opuestos Complementarios, ya que tenemos los llamados Signos Positivos, Masculinos o Extravertidos (que expresan energía yang-activa), y lo Signos Negativos, Femeninos o Introvertidos (que expresan energía yin-pasiva). La polaridad Femenina-Masculina de los doce signos expone esta dualidad primordial de orden superior que se manifiesta a sí misma en infinidad de niveles y, por supuesto, también lo hace a través del equilibrio relativo que presentan los signos en una carta natal. Es decir, si en una carta hay más planetas ubicados en signos masculinos, la personalidad general tenderá a ser más extrovertida dirigiendo parte importante de su energía hacia intereses externos o sociales, pero si el equilibrio de las posiciones planetarias se concentra más en signos femeninos, el temperamento habitual se inclinará a ser más introvertido y a dirigir parte importante de su energía hacia intereses más privados o personales.
En general, los doce signos expresan estas energías universales a través de un particular tipo de comportamiento, que podemos llamar extravertido o introvertido. De esta forma, nos encontramos con que los signos de energía “masculina” se muestran más emprendedores, activos, ejecutivos y sus intereses los llevan hacia afuera, porque su impulso es dirigirse hacia el mundo exterior y producir crecimiento “afuera”. En cambio, los signos de energía “femenina” se muestran más estables, pasivos, tranquilos, receptivos y sus intereses los llevan hacia dentro, porque su impulso es dirigirse hacia su mundo interior y producir crecimiento “adentro”.
SIGNOS MASCULINOS o EXTRAVERTIDOS
Índice del Artículo
Aries – Géminis – Leo – Libra – Sagitario – Acuario
Significado de la palabra Extravertido: extra = fuera / vertido = se vierte hacia
La energía de estos signos se dirige hacia fuera, son signos que buscan, van, hacen y conquistan. Poseen el impulso para crear algo en el exterior, es decir, son extravertidos. Su tipo de energía es la causa y origen de todo, son espíritu creador y manifiestan voluntad para causar, movilizar, iniciar y actuar. Estos signos actúan de forma directa, se inclinan naturalmente hacia lo social y el medio exterior, sus intereses se enfocan en lo que hay afuera y lo que pueden lograr allí. Cuando quieren algo, van por ello, en vez de esperar a que suceda, porque la energía de estos signos busca dejar su impresión “allá afuera” y constatar en las circunstancias externas las intensiones de su voluntad. Los Signos Masculinos impulsan y crean algo que luego entregan a los Signos Femeninos
SIGNOS FEMENINOS o INTROVERTIDOS
Tauro – Cáncer – Virgo – Escorpión – Capricornio – Piscis
Significado de la palabra Introvertido: intro = adentro / vertido = se vierte hacia
La energía de estos signos se dirige hacia dentro, son signos que atraen, reciben, aceptan, y acogen. Poseen la voluntad para manifestar ser, formar y contener algo en el interior, es decir, son introvertidos. Su tipo de energía es el efecto y manifestación de todo, son materia formadora y muestran voluntad para esperar, perseverar, recibir y contener. Estos signos actúan de forma prudente, se inclinan naturalmente hacia lo privado y el mundo interior, sus intereses se enfocan en lo que hay adentro y en lo que pueden lograr ahí. Cuando quieren algo, simplemente lo atraen, en vez de moverse de forma activa, actúan de forma más paciente, contenida y reflexiva en el mundo, porque la energía de estos signos busca ser, aceptar y contener “acá adentro” los efectos de su experiencias personales para luego reflejarlas al ambiente. Los Signos Femeninos recogen y estabilizan lo que iniciaron los Signos Masculinos.